La demanda de robots en los almacenes está creciendo de forma exponencial, y se trata de una tendencia que se espera que cobre fuerza con los avances tecnológicos. Se prevé que el mercado global de robots como servicio (RaaS) se expanda a alrededor de $ 44 mil millones para 2028, creciendo a una tasa compuesta anual del 16,5%.

Muchas empresas ya cuentan con sistemas transportadores flexibles de alta tecnología para optimizar las operaciones de almacenamiento en múltiples niveles. Tener un sistema automatizado aumenta las velocidades de producción y los caudales.

Automatización con Robótica

Las empresas ya están automatizando sus almacenes con robots para reducir la necesidad de mano de obra, mejorar el rendimiento, aumentar la eficiencia entre otros. La automatización robótica ya está redefiniendo el significado de un futuro almacén. Los tipos de robots que están creando estos nuevos almacenes del futuro son:

1) Vehículos guiados automatizados (AGV): los AGV transportan mercancías, suministros o inventario. Se conectan a través de sensores o software IoT que ayudan a navegar mientras cargan y descargan paquetes. La mayoría de los AGV reducen los costos generales al automatizar las tareas manuales

2) Robots móviles autónomos (AMR): los AMR son similares a los AGV en términos de tecnología. Utilizan sensores preprogramados para la navegación. A diferencia de los AGV, los AMR no requieren instrucciones de ruta predeterminadas.

3) Drones aéreos: los drones navegan por el almacén utilizando sistemas ópticos. Pueden escanear a través de lugares altos, bajos o peligrosos para mantener recuentos de inventario precisos.

4) Sistemas automatizados de almacenamiento y recuperación (AS/RS): los robots AS/RS transfieren el inventario a través de diferentes áreas de almacenamiento. Estos robots pueden ejecutar operaciones sin problemas mediante la integración de sistemas de software de ejecución de almacén (WES).

5) Cobots: los robots colaborativos se parecen más a los asistentes de los trabajadores humanos. Estos robots realizan tareas menores, como recoger, empacar y ensamblar, mientras aseguran que el equipo se concentre en tareas productivas.

IA y Digitalización

Las operaciones de almacén son cada día más complejas y el inventario se vuelve más diverso. El número multiplicador de SKU seguirá aumentando a medida que se expanda la industria del comercio electrónico. ¿Cómo se mantiene al día con las complejas necesidades de cumplimiento, las demandas y las expectativas de última hora de los clientes?

Aprovechar la inteligencia artificial y la digitalización para satisfacer las necesidades de almacenamiento es lo que las empresas modernas necesitan hoy. La digitalización cambiará la forma en que operan los almacenes y los hará más inteligentes, inteligentes y eficientes.

A medida que los profesionales de almacenamiento adopten tecnologías de inteligencia artificial como, realidad virtual (VR), drones y dispositivos portátiles para digitalizar sus operaciones, estas herramientas optimizarán la eficiencia de recolección, reducirán los costos operativos y mejorarán las operaciones en curso y la visibilidad del inventario.

Almacén inteligente

El almacén inteligente es la clave del almacén del futuro. Un almacén inteligente agiliza la preparación de pedidos, la clasificación, el embalaje y el envío. Puede identificar rápidamente el artículo correcto y recogerlo utilizando dispositivos de recogida inteligentes, como escáneres portátiles, robots de recogida, gafas inteligentes y sistemas de recogida por luz.

Estos almacenes permitirán reducir costos operativos, aumentar la precisión del inventario, optimizar los flujos de trabajo y mejorar las operaciones de cumplimiento.

Tal y como podemos ver, la automatización juega un papel importante en la construcción del almacén del futuro. Desde drones voladores hasta robots que recogen, empaquetan y clasifican artículos sin intervención humana, la tecnología y la innovación afectarán drásticamente a los almacenes futuristas.

En solo unos pocos años podremos ver almacenes completamente automatizados con un grupo selecto de empleados humanos que supervisan las operaciones. De ahí a que todos los almacenes tendrán que automatizarse para poder seguir siendo competitivos ante el resto del mercado.